PORQUE NO PRETENDEMOS QUE TODOS PIENSEN IGUAL SINO QUE NOS DEJEN PENSAR

De Nuevo a la Academia


“La primera tarea de la educación es agitar la vida,
 pero dejarla libre para que se desarrolle”.

Nuevamente volvemos a las madrugadas, a las jornadas de estudio, al  tinto y al trasnocho; retomamos las aulas, volvemos a ver a nuestros compañeros y docentes, algunos de nosotros regresamos a esta ciudad. Pero no podemos olvidar que detrás del regreso a la cotidianidad académica se encuentran las victorias conseguidas por el movimiento después de estos meses de movilización en los cuales se ha logrado la inclusión de los diferentes estamentos universitarios, en la construcción de una democracia participativa y pluralista.

Es necesario darle forma a lo ya conseguido, para que tanto esfuerzo que implicó la suspensión de las clases, no se vea desperdiciado y entonces en vez de ser una conquista se convierta en una derrota por la falta de participación de nosotros mismos, como artífices del movimiento estudiantil y de esta manera no permitir que suceda igual a lo ocurrido cuando se obtuvo  la conquista parcial del restaurante estudiantil, y que la administración por su negligencia no ha querido aprobar un proyecto viable para el beneficio de toda la Universidad, sin embargo hay quienes seguimos persistiendo en conquistar este derecho ahora negado.

El llamado es a que nosotros mismos debemos ser participes de los espacios de debate, reflexión y construcción de propuestas, para de esta manera erigir entre todos una Universidad incluyente y democrática, de todos y para todos; que cumpla con su papel de crítica constante a las realidades sociales.

Vale la pena recordar que si bien actualmente, por los errores cometidos y las dificultades enfrentadas, el movimiento estudiantil ha perdido legitimidad, pero esto no debe ser una excusa para dejar el trabajo de lado y vendarnos los ojos ante las injusticias que padece la sociedad actual.

La invitación final sería entonces a que asistamos a todos los espacios de nuestras facultades, a la Mesa Amplia, al comité Multiestamentario y a todos los lugares donde sea posible debatir libremente para hacer realidad todo lo obtenido, para mostrar nuestra decisión de no renunciar y resistir.



“El único sentimiento más grande que el amor a la libertad es el odio por aquel que nos la niega”